El marketing de una firma de abogados
Cuando pueda intentaré hacer un esquema sin parrafadas con las
estrategias para promocionar un despacho, de todos modos la mayoría se explican
en este texto.
Antes de empezar a
analizar las estrategias de marketing y dirección debemos diferenciar entre las
estrategias dirigidas a los clientes y las dirigidas a los trabajadores.
En la captación de clientes el
objetivo es mantener y aumentar, en la captación
de talento retener, filtrar y fichar.
El primer paso, o
uno de ellos, es el análisis de la plantilla existente y las especialidades
del despacho. Una vez vistas las capacidades de los profesionales es
importante hacer un esfuerzo para dejar fuera los perfiles que no se adapten y
contratar aquellas personas que complementan y mejoran el conocimiento
existente en la plantilla.
Las redes nacionales y/o internacionales
son cada vez más importantes, responden a la globalización y permiten
prestar mejores servicios y captar más clientes. Con el aumento de la movilidad
los despachos que no puedan asesorar en distintos estados, ya sea por sí mismos
o despachos asociados, perderán gran parte de su clientela, tanto la que ya
tienen como la potencial.
Junto a ese primer
paso no podemos olvidar la importancia del posicionamiento
de la firma. Por posicionamiento se entiende la imagen que tienen los
clientes del despacho, esto es de la empresa, tal y como comentamos en esta
entrada. El
posicionamiento es clave, permite que nuestro despacho sea identificado y
diferenciado del resto de opciones legales existentes. El objetivo es que
nuestro target (cliente actual o potencial) piense que nuestro despacho es el
más adecuado para sus necesidades. Además, no basta con conseguir la percepción,
el servicio tendrá que estar a la altura de lo imaginado, pues de no ser así la
insatisfacción se materializará con la pérdida del cliente.
Para dar a conocer
el despacho la vía típica de los despachos ha sido el boca oreja, esto es la reputación ganada tras un buen trabajo,
pero hay que ser más ambiciosos. El papel de la reputación sigue siendo un pilar básico, pero la forma de
obtenerla cada vez es más compleja. Otra vía importante para darse a conocer es
la celebración de conferencias sobre novedades jurídicas y controversias
legales. Las conferencias son una forma muy buena de captar talento, pero
también de ganar clientes si se consigue atraer gente como directivos,
economistas, políticos, investigadores, emprendedores, etc. Para la captación
de estos últimos no basta con la calidad jurídica de la exposición,
también hay que dar un servicio a las empresas o particulares que acuden
a la conferencia.
Junto a las
conferencias sobre novedades legislativas y controversias jurídicas se
encuentra la formación. Los
despachos pueden preparar cursos formativos que son de gran ayuda para
la reputación de la firma. La formación no sólo tiene que venir por iniciativas
propias del despacho, también es posible la colaboración con universidades y
escuelas superiores. Una manera es la colaboración directa entre
universidad y despacho, pero también se puede incentivar a los abogados
para que imparten clases en nombre propio. Para que los profesionales del
puedan compaginar su doble faceta como ejercientes y profesores es necesario
que el despacho permita horarios flexibles y entienda que las horas de
trabajo pueden descender ligeramente.
Otra característica
que produce una disminución en las horas de trabajo pero aumenta mucho la
reputación es la producción científica.
Incentivar la producción de artículos jurídicos y participación en manuales
supone un crecimiento enorme en el prestigio del despacho.
Las estrategias
vistas hasta ahora, en general, repercuten más rápidamente en la captación de
talento que en la de clientes. Por lo tanto, para aumentar la clientela será
necesario difundir mensajes en otros sectores no especializados.
Hasta la fecha, la
vía más menospreciada en este sector ha sido la publicidad. Como ya vimos en la entrada comentada antes, los despachos
no utilizan esta vía. Sin embargo, preparar una buena campaña publicitaria
puede suponer un importante aumento en el número de clientes. La
publicidad de los despachos más grandes puede llegar a utilizar medios más
generalistas, hecho que ayudaría a la creación
de marca. Por otro lado, a medida que el presupuesto se reduce los medios
generalistas pierden interés en favor de los especializados, que al fin y al
cabo son los más rentables. En la anterior entrada ya vimos cómo anunciar un
despacho.
El poder de la imagen es un factor a tener
en cuenta siempre. En los despachos hay que estudiar la imagen de los
abogados y de las oficinas.
En cuanto a los abogados, la vestimenta tiene
que ser la tradicional y hay que tener en cuenta que el producto a vender es
justamente el profesional. Por lo tanto, el despacho se vende a través de sus
trabajadores, que son los embajadores de la firma. Calidades como: el protocolo,
la negociación, la comunicación, la seguridad, la persuasión,
la asertividad, la proximidad y la confianza, serán
condiciones muy favorecedoras para atraer a los clientes.
En cuanto a la
imagen de los despachos hay que hallar
las partes visibles para los clientes. La primera impresión viene por la ubicación del despacho, tanto en la zona
geográfica como en el edificio concreto. Muchas empresas quieren ser
asesoradas por firmas que tengan localizaciones a la altura de su reputación.
Además, la segunda imagen a cuidar es el recibidor, una entrada con imágenes corporativas y un personal atento
en la entrada es clave. Finalmente, la tercera imagen que todo cliente acaba
viendo es la sala de reuniones, aquí
es importante seguir con la imagen corporativa, a lo que debemos añadir la
pulcritud, orden, confidencialidad y comodidad. En cuanto a las secretarias, su calidad profesional es
básica, tanto las secretarias de los abogados como la que reciba los clientes
en la entrada.
Otros aspectos a
tener en cuenta son los presupuestos,
dependiendo de la experiencia y calidad del servicio los precios podrán
ser más altos. Nunca se debe intentar vender nada por encima de precio, si un
despacho no puede ofrecer la calidad que busca debe ganar experiencia
reduciendo precios hasta que se haga un nombre y pueda aumentar el margen de
beneficio. Esto es posible porque en la abogacía la experiencia es un factor
clave para los clientes. Un buen presupuesto debe complementarse con un seguimiento
del caso y una buena comunicación cliente-abogado. Una buena medida
a tener en cuenta cada cierto tiempo o al finalizar un servicio es el ofrecimiento
de valoraciones por parte del cliente, tanto para satisfacción del
cliente como mejora del servicio.
Finalmente, la
captación de clientes mediante reuniones
y presentaciones sigue siendo una vía fundamental para los despachos, hecho
que difícilmente puede cambiar. En las visitas es importante tomar las
riendas y ofrecer los servicios activamente, nunca esperar a ver qué pide
la empresa, pues el conocedor del ordenamiento jurídico es el vendedor.
Evidentemente, el abogado deberá conocer hasta el mínimo detalle del cliente
para ganárselo.
Otras medidas a
tomar pasan por las newsletters, folletos informativos, contactar
y colaborar con los medios de comunicación, ruedas de prensa, asistencia
de los abogados a actos públicos y privados como presentaciones,
conferencias, etc.
Crec que és un gran article, que hauríem de llegir tots els advocats, o que s'expliqués als Col · legis d'Advocats i no es dediquin només a fixar un preu.
ResponderEliminarM'agrada molt la tipografia del títol. Enhorabona.
Gracies Jose.
ResponderEliminarexcelente artículo, con muy buenos consejos a seguir.
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