Ley 26/2013 de cajas de ahorros y fundaciones bancarias (Parte IV): Fundaciones bancarias

Old woman examining a coin by a lantern (Sight or Avarice) - Gerrit van Honthorst
El régimen jurídico de las fundaciones bancarias se encuentra, principalmente, en la Ley 26/2013, aunque también les son de aplicación supletoria la Ley 50/2002 de fundaciones y las leyes autonómicas sobre fundaciones, en caso de que sean aplicables por tratarse de fundaciones que ejerzan principalmente su actividad en una comunidad autónoma.

La Ley 26/2013 regula el procedimiento de transformación de las cajas de ahorros a fundaciones bancarias. Por ejemplo, para que se puedan constituir en este tipo de fundaciones hay que superar uno de los dos siguientes umbrales: i) activo total consolidado de la caja supere los 10 millones de euros, o ii) cuota en el mercado de depósitos de su ámbito territorial de actuación sea superior al 35% del total de depósitos.

La ley separa entre dos supuestos de transformación a fundación bancaria, las que proceden de una caja de ahorros y se constituyen en fundación bancaria directamente y las fundaciones ordinarias que pasan a participar de una caja de ahorros, motivo por el cual deben transformarse en fundación bancaria. Para el segundo caso la participación debe ser del 10% del capital o derechos de voto, o que pueda nombrar o destituir algún miembro del órgano de administración (aunque no se llegue al 10% mencionado).

Igual que en el resto de fundaciones, y a diferencia de lo visto en otras entradas para las cajas de ahorros, en las fundaciones bancarias, el máximo órgano de gobierno y representación se llama patronato. El número de miembros del patronato se limita a un máximo de 15. Igual que en las cajas de ahorro, en las fundaciones bancarias también se regulan ciertos requisitos para asegurar la profesionalidad e independencia de sus gestores.


Esta fórmula de fundación bancaria es la que se ha impuesto, quedando solamente dos cajas de ahorros como tal (sin perjuicio de las que puedan quedar y desconozca), Caixa Ontinyent y Colonya Caixa Pollença. Como ejemplo conocido de actividad bancaria a través de fundación bancaria está La Caixa (fundación) con CaixaBank (entidad bancaria), entre varias otras como Ibercaja fundación que actúa a través de Ibercaja Banco.