El papel de los Estados ante el conflicto sirio: ¿Por qué los gobiernos se plantean la intervención militar?
*Debido a la complejidad de la materia, aquí sólo se
quiere destacar una de las variables que afectan a los gobiernos a la hora de
intervenir militarmente en otro Estado sin el apoyo directo de instrumentos de
derecho internacional público. Tampoco se quiere reflejar una opinión personal
sobre ningún caso concreto, aunque el planteamiento de la cuestión se debe a la
posible intervención de EEUU en Siria.
Cuando un Estado
interviene en otro militarmente suele buscarse una razón mercantil, sobretodo
de comercio exterior y estabilidad económica. Sin embargo, el cambio de
paradigma habido en las últimas décadas, en cuanto a materia de justicia
internacional, es una causa de mucho peso a la hora de intervenir o no en un
país ajeno al gobierno que decide actuar.
A medida que la
sociedad y sus instituciones maduran, el papel del Estado adquiere una
finalidad que va más allá de la simple conservación fronteriza, primero militar
y después democrática y social. A medida que la sociedad avanza y con ello la
Administración del Estado, estas finalidades sobrepasan el interés social
interno para defender un sentido de justicia global, que busca el bienestar del
ser humano como tal.
Para la preservación
de los derechos mínimos de todo ciudadano existen las organizaciones internacionales,
pero los Estados como parte individual y activa pueden seguir actuando por su
cuenta. Esta actuación por cuenta propia busca la aceptación previa de la
comunidad internacional, es decir a través del derecho internacional público.
Sin embargo, cuando los instrumentos internacionales no pueden dar una
respuesta suficiente (o ninguna), principalmente a causa de los complejos
procedimientos legales del derecho internacional, la intervención por cuenta
propia y sin aceptación previa de la comunidad internacional adquiere peso.
Por lo tanto,
cuando un Estado entiende que las vías diplomáticas y legales son insuficientes
para defender los derechos humanos mínimos utiliza la vía militar como sanción
al gobierno infractor (o supuestamente infractor). Pensando que ello puede restablecer o arreglar el estado de las cosas.
Estas actuaciones
son una intromisión a la soberanía del Estado intervenido, pero también una infracción de los
pactos entre el resto de Estados. Es decir, hacia los tratados internacionales
que, supuestamente, han devenido insuficientes y provocado la intervención
militar unilateral. En consecuencia, estas intervenciones pueden provocar
nuevos conflictos, como un efecto dominó, a no ser que el resto de partes
implicadas acepten tácitamente que los instrumentos internacionales han sido insuficientes
para dar respuesta al problema. La otra opción es que el país que interviene
tenga la suficiente capacidad para actuar sin la aceptación tácita o expresa
del resto de países. Es decir, que sea una autoridad pública e internacional de facto, pero la aceptación tácita en
este tipo de actuaciones puede ser más común de lo que oficialmente se diga, ya
que sólo el (o los ) Estado interventor tendría los recursos necesarios para
asumir la responsabilidad de los actos públicamente.